Preservar la capa de ozono: un desafío global

La conmemoración anual del Día Internacional de la Preservación de la Capa de Ozono, instituida por la ONU en 1994, honra el acuerdo de Montreal, el cual promueve la eliminación de sustancias dañinas para la atmósfera.
Este compromiso global, adoptado por más de 200 naciones, incluida Cuba, ha demostrado que la acción conjunta es la clave para revertir el daño al medio ambiente.
En 1994, la Asamblea General de las Naciones Unidas estableció el 16 de septiembre como el Día Internacional de la Preservación de la Capa de Ozono, una fecha que celebra la firma del Protocolo de Montreal en 1987.
Desde la adopción de este acuerdo internacional se inició la importante tarea de eliminar gradualmente aquellas sustancias químicas usadas en la industria de la refrigeración, en aerosoles y espumas, las cuales, según indican los estudios, son responsables del agotamiento de la capa de ozono.
A este pacto internacional se han adherido cerca de 200 países, entre ellos Cuba. Nuestra nación se sumó activamente a dicho compromiso, poniendo fin al uso de los clorofluorocarbonos en la refrigeración doméstica y al bromuro de metilo en la agricultura, entre otras medidas implementadas que demuestran como la acción coordinada a nivel nacional puede sumar de manera significativa al gran objetivo global.
La suscripción al Protocolo de Montreal sentó un precedente: demostró fehacientemente que la cooperación internacional es la vía más efectiva para alcanzar avances tangibles en materia medioambiental.
El Día Internacional de Preservación de la Capa de Ozono nos recuerda que con voluntad y colaboración, podemos sanar nuestro planeta y asegurar un futuro más seguro para todos.