Altas expectativas del pueblo con sesiones del Parlamento cubano

La Habana, 13 jul (ACN) El Quinto Período Ordinario de Sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP), en su X Legislatura, además de intenso, promete tener fuertes y profundos debates en aras de que el Programa de gobierno dirigido a eliminar distorsiones y reimpulsar la economía avance con resultados alentadores.
Desde este lunes 14 y martes 15 a nivel de las 11 comisiones permanentes de trabajo, hasta las jornadas en plenario a partir del miércoles 16, en el Palacio de Convenciones de La Habana, los diputados cubanos evaluarán la marcha de planes, programas y medidas de gran impacto en la vida de la población y en la economía.
En sus intercambios con altos funcionarios, entre ellos, ministros y representantes de instituciones y territorios, sin dudas no faltarán los señalamientos críticos, las alertas y las propuestas de soluciones, porque muchos y bien complejos son hoy los problemas que enfrenta el país, que demandan al menos respuesta inmediata y nada de contemplaciones o satisfacción con lo alcanzado.
¿Cómo sortear el recrudecido bloqueo estadounidense, ese que a diario obstaculiza el acceso a las escasas divisas, al combustible, a los alimentos y materias primas, y que ante tantas carencias de recursos y de energía eléctrica nos obliga a ser más eficientes, a más controles internos y disciplina, en fin, a cumplir lo que a cada cual le toca hacer?.
Si siempre cada sesión de la ANPP genera expectativas en la población, ahora en que la situación económica y social del país es muy crítica, la gente necesita saber qué perspectivas hay, por ejemplo, con la distribución de alimentos de la canasta familiar normada, con los elevados precios, con los apagones, el transporte público, con la venta minorista de gas licuado, con el abasto de agua, con la bancarización, con la atención a personas y familias vulnerables…
Por suerte, y a diferencia de lo que sucede en muchos parlamentos del mundo, el de Cuba se caracteriza porque casi la mitad de sus diputados son delegados de base del Poder Popular, es decir, están en permanente contacto con los problemas del barrio y de su municipio, en la búsqueda de soluciones.
También es cierto que el máximo órgano del Estado y sus comisiones de trabajo entre una sesión ordinaria y otra se hallan inmersos en tareas de control y fiscalización en los territorios.
Así, en el primer semestre la Asamblea Nacional, con su presidencia al frente, visitó 10 provincias, casi 70 municipios y cerca de 900 entidades de producción y servicios, además de sostener encuentros con más de 40 mil personas.
Y esta experiencia, lo visto en tales intercambios con el pueblo, conocer y constatar in situ sus preocupaciones o inquietudes, un estilo de trabajo del Parlamento cubano, enriquece siempre los debates en las propias sesiones a nivel de comisiones y del plenario.
Como el Programa de gobierno para eliminar distorsiones y reanimar la economía transversaliza casi todo el quehacer de la nación, de sus organismos, actores económicos y de los territorios, y su ejecución requiere de la participación popular, independientemente de la actualización que ofrezca ahora Manuel Marrero Cruz, Primer ministro, la marcha de objetivos e indicadores se verá también en las comisiones.
Lo que el pueblo está esperando de nosotros, sus principales representantes y servidores públicos, son acciones concretas e inmediatas que ayuden a superar la profunda crisis económica que tanto daño está haciendo al tejido espiritual de nuestra nación, dijo en la clausura del reciente X Pleno del Comité Central del Partido, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, su Primer Secretario y Presidente de la República.
En la concreción de ese llamado, gran responsabilidad y compromiso, tienen nuestros diputados, urgidos hoy más que nunca a estar con el oído pegado a la tierra y a controlar, fiscalizar, hacer cumplir las leyes y normativas a todos los niveles y dar seguimiento al combate contra el delito, las indisciplinas y la corrupción.